Usted está aquí:  >>> En blanco y negro 

Ni sucios ni malvados

Ni sucios ni malvados

sucios y malvados, Juanjo Braulio,

Ni sucios ni malvados
Empar Fernández

He tomado una determinación que espero mantener el tiempo suficiente como para incorporarla definitivamente a mis hábitos. He resuelto dejar de escribir reseñas con la frecuencia con la que lo venía haciendo en los últimos años. He decidido que sólo escribiré sobre aquellas novelas, de género o sin él, que haya leído por placer y sin la intención expresa de reseñarlas. Novelas que me hayan gustado, sorprendido o impactado lo suficiente. Debo decir que nunca reseñé, ni para bien ni para mal, una novela que me hubiera parecido verdaderamente lamentable. Sé lo que cuesta levantar una historia y no pretendo que mi juicio sea universalmente válido ni mucho menos infalible. Tampoco me propongo improvisar halagos ni regalar falsas palabras de admiración. Parafraseando el título de una obra reciente pretendo no ser incluida ni entre los sucios ni entre los malvados.
Siguiendo con mi buen propósito, dedicaré este espacio a una novela negra recientemente publicada: Sucios y malvados. Su autor, Juanjo Braulio, es un hombre inquieto por naturaleza –aprendiz de todo y oficial de nada, según sus propias palabras- que ha hecho del periodismo su profesión. Durante años ha colaborado en distintos medios y en la actualidad dedica parte de su tiempo a la ficción. Es autor de un libro de viajes En Ítaca hace frío, de la aclamada –y muy recomendable- El silencio del pantano, que tendrá pronto adaptación cinematográfica, y de la novela que nos ocupa, Sucios y malvados.
Para explicar la línea argumental de Sucios y malvados utilizaré las palabras de su autor. “Valencia es el escenario donde un hombre aparece ahorcado justo en el lugar donde se levantaba el cadalso que guardaba la puerta al barrio de los burdeles por el que la ciudad era famosa en toda Europa entre los siglos XIV y XVIII. Mientras tanto, en un edificio abandonado en la playa de la Malvarrosa, un grupo de meretrices acude, cada noche, a rezar desesperadas a la capilla de la Virgen de las Rameras. Entretanto, un abogado sin escrúpulos, un músico con la mente rota por una infancia infernal, cuatro mujeres que decidieron dejar de ser víctimas para convertirse en verdugos y un fugitivo sin nombre ni humanidad pululan por las calles donde la inspectora de Homicidios Roma Besalduch intenta resolver un puzzle diabólico mientras cree que fracasa en su intento de intentar conjugar su carrera profesional con su maternidad”.
Todo lo anterior y mucho más encontrará el lector en la novela y todo ello engarzado en un armazón muy complejo que funciona a la perfección. Una novela nada complaciente, escrita con un estilo impecable que entusiasmará al lector avezado en las investigaciones laboriosas, en aquellas pesquisas en las que son múltiples los cabos de los que tirar, numerosos los implicados y oscurísimos los motivos de los criminales.
Sucios y malvados tiene como protagonistas personajes complejos y singulares y todos ellos perfectamente perfilados por su autor. El músico afectado de un extraño síndrome resulta inolvidable, exactamente igual que las prostitutas que desfilan ante una virgen de mala factura creyendo a pies juntillas que la imagen puede mejorar su destino.
Desde luego, y en contra de lo que parece ser el signo de los tiempos en lo tocante a las novelas negras más vendidas, Sucios y malvados no ha sido escrita en tres meses ni su documentación ha sido realizada a partir de unas consultas en un chat de whatsapp. Por si lo dicho fuera poco, la novela intenta trazar esa delgadísima línea que separa la ley de la justicia.

 

Los textos, videos y audios de esta web están protegidos por el Copyright. Queda totalmente prohibida su reproducción en cualquier tipo de medio o soporte, sin la expresa autorización de sus titulares.
Editanet © Copyright 2017. Reservados todos los derechos