La España Orwelliana
Pérez Velasco, Víctor Miguel.
Editorial Sepha.
Málaga 2011. 297 páginas.

por Angel Maestro

Este libro no es un capricho, ni una curiosidad científica, ni una especulación intelectual, afirma el autor en los comienzos del libro. Por el contrario es un estudio profundo sobre la más conocida obra de George Orwell (Eric Arthur Blair. 1903- 1950 ), titulada ” 1984” – una de las más importantes novelas del siglo XX – y las similitudes con la España de hoy, la España orwelliana, cual el acertado título.

La disección de “1984” que realiza Pérez Velasco es completa, exhaustiva , pormenorizando conceptos básicos de la novela cual el del Gran Hermano, la Policía del pensamiento, la neolengua, la personalidad del protagonista Winston Smith y de Julia, la versión femenina de Winston, la rebelión de ambos contra el Partido, inmersos ambos personajes en la sociedad totalitaria que todo, absolutamente todo, lo abarca.

En “1984” se refleja a través del imaginario país Oceanía, inequívocamente la Rusia estaliniana, con todas sus características : máximo culto al dirigente supremo, Stalin, el Gran Hermano, el enemigo por antonomasia, Trotsky, Goldstein en la novela, los chekistas, la policía del pensamiento , la máxima descalificación, los enemigos del pueblo, la reescritura del pasado etc. Orwell no llegó a conocer lo que aún superaría la sociedad totalitaria estaliniana, “el gran salto adelante” y “la revolución cultural”, de Mao, pero en alguna de sus descripciones en el control total del pensamiento y en la autocensura si se le aproxima, un “ 1984” hecho realidad en una Oceanía no virtual sino trágica y terriblemente real.

Pérez Velasco analiza las similitudes existentes entre

esa Oceanía y la España nueva desde 2004 hasta nuestros días. Aproximaciones algunas cual la realización de los principios fundamentales del socialismo con el resultado previsto de hacerse permanente la desigualdad económica. Los “Dos Minutos de Odio” orwelianos “ son parangonables con las descalificaciones e insultos proferidos por los socialistas contra los oponentes a su concepción totalitaria.

La reescritura del pasado, la tarea principal que desarrolla el protagonista en el Ministerio de la Verdad con evidente reflejo de la reescritura histórica estaliniana, encuentra su reflejo en España con la nueva Historia a golpe de leyes cual la Ley de la Memoria Histórica, en la que los vencidos pasan a ser vencedores y los vencedores vencidos.

Pieza fundamental en esa nueva sociedad, la comparación española es nítida, la constituye la neolengua, que en la medida que la lengua determina la estructura del pensamiento humano, esta se erige en un sistema de control psicológico del pensamiento, y es que en la España actual el partido ha creado su propia neolengua al estilo más orweliano.

España no es la Oceanía de Orwell, pero si existen registros de evidencia prístina cual la interpretación de la historia de la Guerra Civil, el totalitarismo lingüista, el Estado español ,nunca España, el lenguaje del Ministerio de Defensa al hablar de los muertos en acciones de paz, nunca se habla de caídos en guerra, cual el caso de Afganistán, etc.

Las conclusiones comparativas de “1984” con la España de 2011 aparecen descritas con una exposición basada en la fuerza de la razón. La humanidad progresa cuando el libre arbitrio pone en marcha a la razón y, sin interferirla, la deja actuar según su dialéctica interna. Un empeño en desapasionarse, independizarse y aproximarse laboriosamente a la objetividad. La antitésis de la España del control del pensamiento, de la neolengua, del odio, de la reescritura de la historia. En suma, de la España orwelliana de nuestros días.

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