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Itinerancias
Paisajes y leyendas de España
ITINERANCIAS
de Márcio Catunda
Frenesí
Por las aceras soleadas
que el alcohol del viento enfebrece,
voy desvelando avenidas ínvidas,
sobrevivo en las encrucijadas.
Cumplo, con palabras visionarias,
el peregrino rito,
recogiendo fortuna y mendrugo
en la jornada de aventura empírica.
Voy en la vertiente del sortilegio.
Voy sorteando desfiladeros,
con jubiloso paso triunfal.
Bebiendo la sede austera,
con ritmo de enardecida armonía
y deslumbrado frenesí.
Sinestesia
Disfruto ahora de sonidos y colores,
inmerso en minutos sublimes.
En el bosque placentero,
idolatro la pureza del aire.
Lejos del trueno de la urbe,
hierba húmeda, hojas secas,
ando absorto, en lírica pasión.
Rechazo la industria tumultuosa.
Soy un contemplador de golondrinas.
Mi verdad es una utopía:
un celestial sentir metafísico.
Sólo, por la vereda marginal,
busco la sinestesia perfecta
en la mañana evasiva del tiempo.
Prodigio
Sin la razón oscura del miedo,
en el asedio enigmático de las horas,
sentir venturosamente el tiempo
fluir en un sensible prodigio.
La fábula serena del viento
en las voces de la inquietud íntima,
en el viaje en que no me aflijo,
girando en la lotería idílica.
¡Naturaleza! Generosa dádiva!
Momento en que la vida pesa poco:
la esencia del reposo en el alma.
Albricias de entusiasmo
ondulan en la percepción contrita,
exentas del colectivo alarde.
Fluidez
En la ribera verde de este río,
manantial de agua inspiradora,
corriente de un rito de pasaje,
paseo, contemplando la fluidez.
Voy en el ritmo de su deslizar,
ondulando en veloz pensamiento.
De hialinos fluidos me alumbro,
en el aéreo caudal de abstracta labranza,
nadando en la visionaria imagen.
Signos líquidos se registran.
Calígrafo del sentimiento,
anoto en mi diario poético:
el río es metáfora de la vida;
un pródigo entregarse feliz
al verbo misterioso del instante.
Ocio
Me abstraigo de las percepciones inmediatas.
Un nada-que-hacer auspicioso
y un hambre de luz me asedian.
¡Impetuosa libertad esotérica!
Abstracción, despreocupación,
hora decisiva de seguir
el desván tranquilo del torrente
como quien se extravía en un sueño.
Ocio imprescindible que ejercito
pese a la sociedad:
marginal clásico, post-moderno.
Estupefacto y enajenado
por la parafernalia mundana
y por el misterio de existir.
Fe
Camino como quien exorciza
los demonios de la angustia existencial.
El invierno hizo estragos en las tonalidades.
Emociones y pensamientos vanos
me obsesionaron hasta el momento.
¡Suave es la sed de saber!
Los obstáculos desaparecen,
cuando fluye la jornada del encanto.
La luz del día como certeza,
la fe en el extraño milagro humano
y la esperanza contra la incertidumbre.
¡Cualquier música que me redima!
Consuelo, bálsamo de quietud
y el buen sentido, a pesar de los pesares.
Luz
Luz terapéutica, silencioso
rincón ajardinado y canoro
que demando impenitente,
¡tengo pavor de mi propio miedo!
¡Agridulce luz cotidiana!
Esencia de universal bondad,
vengo a beber el manso efluvio,
sublime resplandor celestial.
Eres la verdad absoluta, el verbo
substantivado por el ser vivo.
Centelleante cristal colosal.
Que todos los hombres te bendigan,
divina luz de todos los seres!
Luz de yugo suave y fardo ligero,
imagen de la perfección que adoro.
Suspensión
El estruendo de una avenida
no me retira de la suspensión.
¡Pertenecer a la expansión del día!
Ver a través del espejo de la realidad.
En peregrinas calles de idilio,
siento blandos devaneos líricos,
a la espera de la fe transformadora,
en un devoto ideal de armonía.
Horas en las que se me olvida sufrir
y contemplo la luz del sol fraterno
y el cuerpo del todo en esplendor.
Alquimia
¿Que consciencia seré en el Empíreo,
después de la ebullición del cuerpo?
Pregunto a la transitoria mañana.
- se trata de devolver al Sol
los átomos ígneos del azogue -
me dice la naturaleza beatífica,
en el extravío instantáneo.
- No se trata de extinguirse el fuego
de la respiración y desvivirse -.
El espíritu insufla vida en el todo.
Estudio la alquimia de la vida:
supongo la transmutación etérea
y el oro fortuito de la certeza
en los volátiles vórtices.
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