Editanet, Espacio  Literario y Artístico

Usted está aquí:  >>> La tradición clásica 

El Reino de Granada

 

EL REINO DE GRANADA, ULTIMO REINO HISPANO-MUSULMAN: I MILENIO

 

EL REINO DE GRANADA, ULTIMO REINO HISPANO-MUSULMAN

Haga clic aquí para obtener acceso a la Galería.

 

M. Dolores Gallardo López

Este año 2013 en colaboración con la UNESCO se está celebrado en Granada y otras ciudades andaluzas con muy diversos actos el I Milenio de la creación del reino de Granada.

El último, que se iniciará en unos días, será la magna exposición, en el palacio de Carlos V de Granada, “Arte y cultura de al Ándalus. El poder de la Alhambra centrada especialmente entre los siglos XI- XIV, durará desde el 2 de diciembre de 2013 a 2 marzo de 2014.

Parece, pues, interesante recordar este antiguo reino y cómo inició su andadura.

EL REINO ZIRÍ

Después de la caída del califato de Córdoba y la desaparición de los omeyas andalusíes, la España musulmana quedó fragmentada en numerosos reinos pequeños: los reinos taifas. Uno de ellos fue el reino zirí de Granada

Este reino taifa fue fundado por Zawi ben Ziri as-Sinhayi, personaje de origen bereber. Nació y murió en África. En época de Almanzor fue destacado general y después de la caída del califato, se estableció la taifa de Granada e inició allí la dinastía de los ziríes.

Eligió como capital a Medina Garnata, la actual Granada. Gobernó entre los años 1013 y 1019. Después decidió regresar al norte de África. Había permanecido en al Ándalus unos veinte años.

Zawi ben Zirí se ha convertido en el protagonista de la novela de J. Luís Serrano titulada Zawi (2008).

El reino zirí abarcaba Granada, Málaga, una parte de Córdoba, Jaén y Almería. Se mantuvo desde 1013 a 1090, año en el que cayó en poder de los almorávides. Su último rey Abd Allah ib Buluqquin fue destronado y deportado a Marraquech, donde murió: su tumba se conservan en Agmat, cerca de la capital de los almorávides. Después, en 1154, los almohades entraron en Granada. Con los almorávides y los almohades todo al Ándalus se convirtió en una provincia del imperio musulmán norteafricano.

Como ejemplos del arte de la época zirí han quedado restos de las murallas ziríes (actualmente quedan en pie parte de los paños del lado norte) de alcazaba “Cadima” o alcazaba Vieja donde se encontraba la residencia de los reyes ziríes, en lo más alto del actual barrio del Albaicín, y la alcazaba de Málaga (taifa en la que también gobernó la dinastía zirí).

EL REINO NAZARÍ, ÚLTIMO REINO HISPANO- MUSULMÁN

Entre el final del reino zirí y el comienzo del nazarí hay un intervalo de casi 150 años (de 1090 a 1154 los almohades entraron en Granada 1232), época en la que al Ándalus, dominado por los almorávides y los almohades, paso a convertirse en provincia del imperio norteafricano.

Tras la derrota de los almohades en 1212 en la batalla de las Navas de Tolosa, resurgieron nuevamente los reinos taifas en todo al Ándalus y en ese periodo en el sureste de la península comenzó a tomar importancia el reino y la dinastía nazarí. Los nazaríes procedían de la familia Ben Nasr, residente en Arjona (Jaén), pero de origen bereber.

El reino nazarí fue fundado hacia 1231/32 por Ibn Yusuf Ibn Nasr al-Hamar a partir del reino taifa de Arjona y reinó con el nombre de Muhamad I. Al Hamar, que quiere decir “el Rojo”, es conocido como Abenamar en los romances castellanos.

Conquistó Jerez de la Frontera (Cádiz), Baza y Guadix (Granada) y un año más tarde Úbeda y Porcuna (Jaén) y posteriormente Jaén (esta última fue elegida capital de su reino). También englobó el reino taifa de Málaga y el de Almería.

En 1238, se apoderó de la taifa de Granada y convirtió a Medina Garnata (Granada), capital de los reyes ziríes, en capital de su flamante reino.

Poco duró al nazarí al Hamar la totalidad del territorio que había conquistado. En 1244 el rey castellano-leonés Fernando III conquistó Arjona y después Jaén. En 1246 al Hamar pactó con él: le entregó Jaén, se comprometió a pagar parias (tributos) y a ayudarlo militarmente. Todo ello a cambio de una tregua de 20 años. En virtud de ese pacto, cuando Fernando III en 1248 decidió atacar Sevilla, tuvo que enviarle tropas.

Debido a las conquistas llevadas a cabo por Fernando III, a su muerte, ocurrida en 1252, Castilla era el único reino peninsular que tenía frontera con el reino nazarí último reino musulmán hispano.

Al Hamar o Muhamad I edificó en Granada la alcazaba sobre los restos de una antigua fortaleza y en ella vivió. También inició la construcción de la Alhambra, que ampliaron y embellecieron sus sucesores. La Alhambra se convirtió en residencia definitiva los reyes nazaríes.

A Muhamad I lo sucedió su hijo Muhamad II.

Época de prosperidad

El reino nazarí de Granada era, como hemos visto, un reino tributario del reino de Castilla-León, pero su posición geográfica favorable, con las montañas de Sierra Nevada como barrera natural, y el buen hacer de sus gentes le permitieron prosperar.

Los emires nazaríes supieron explotar la rivalidad entre castellanos y aragoneses y la debilidad interna del reino de Castilla, cuyos reyes se enfrentaron a una levantisca nobleza, para alcanzar su máximo esplendor político y cultural. De hecho Granada fue una ciudad próspera durante la crisis del siglo XIV que asoló Europa. Granada también sirvió de refugio para los musulmanes que huían de las tierras que los reinos cristianos iban conquistando.

La Granada nazarí produjo un magnífico florecimiento cultural del Islam. Muestra evidente es el complejo conjunto arquitectónico de la Alhambra, ubicado en la colina llamada “la Sabica”, donde residía el rey nazarí.

Un buen documental sobre la Alhambra y la belleza que encierra es “La Alhambra o el poder de la creación”:

http://www.youtube.com/watch?v=ntjvjDVOMtY

Recientemente J. Luis Serrano ha novelado los orígenes de la Alhambra y el convulso siglo XI que la vio nacer en La Alhambra de Salomón (2013).

Decadencia y caída final del reino nazarí

Tras una época de esplendor, el reino quedó bajo el gobierno de distintos sultanes incapaces de mantener el control del territorio. A la caída del reino nazarí contribuyeron: Por un lado la crisis política y económica en el Reino nazarí pues desde hacía algún tiempo las luchas entre dos bandos (Zegríes y Abencerrajes) habían abierto un periodo de inestabilidad que finalmente el reino de Granada no sería capaz de superar. Por otro la pujanza del reino de Castilla tras el fin, hacia 1480, de la guerra civil entre los partidarios de la princesa Isabel (hermana del fallecido rey Enrique IV) y los de la princesa Juana (hija del Enrique IV) y el definitivo asentamiento de Isabel I en el trono.

Las luchas intestinas entre dos facciones del poder nazarí acabaron por arruinarlo:

En agosto de 1464 Abu l-Hasan Alí (Muley Hacén), hijo del emir Sa'd al-Musta'în, sucedió a su padre y accedió al trono con el apoyo de los abencerrajes. Con Muley Hacén se inició un paréntesis de paz y prosperidad gracias, entre otras circunstancias, a la guerra civil de Castilla, entre las princesas Isabel y Juana, hermana e hija respectivamente del rey Enrique IV, como hemos indicado.

El final de la crisis castellana coincidió con la decadencia de Muley Hacén. El reino de Granada, como ha quedado, dicho vivía ya fuertes conflictos internos que se agudizaron al final de su reinado. Sus dos hijos, temiendo ser asesinados por su padre, huyeron de Granada a Guadix y allí Boabdil se proclamó emir en 1482, apoyado por la familia de los abencerrajes y su madre, la sultana Aixa. Tomo el nombre de Muhammad XII.

Nuevamente se entabló la guerra civil esta vez entre los partidarios de Muley Hacén y de su hermano, apodado El Zagal (El victorioso), y los partidarios del sublevado Boabdil (Muhammad XII).

Abu l-Hasan Alí (Muley Hacén) huyó de la ciudad de Granada. En 1485 nombró heredero a su hermano y ese mismo año falleció en el castillo de Mondújar.

Una leyenda etiológica pretende que fue enterrado en la cumbre más alta de la cordillera de Sierra Nevada: así explica el nombre del granadino monte Mulhacén (el más alto de la península ibérica: 3.874 mtrs) por el nombre del infortunado emir Muley Hacén.

El Zagal tomó el nombre Muhammad XIII.

Finalmente tío y sobrino llegaron a un acuerdo: el Zagal obtuvo la parte oriental del reino (incluía las ciudades de Málaga Baza, Guadix y Almería) y Boabdil obtuvo Granada.

Así pues, recién acabada la guerra civil en Castilla, en 1480, comenzó -una vez más- en 1482 la guerra civil del reino de Granada con la sublevación de Boabdil y su hermano.

Los Reyes Católicos, que sabían por experiencia cómo debilita una guerra civil, supieron sacar provecho de las circunstancias: A partir de 1484 las tropas de las coronas de Castilla y Aragón (los Reyes Católicos) llevaron a cabo una larga y tenaz serie de asedios en lo que se denominó la Guerra de Granada, con el fin de incorporar el último reino musulmán a la Corona de Castilla.

En 1487 tras un duro asedio las tropas cristianas conquistaron Málaga, Baza ofreció una de las resistencias más larga y enconada de toda la guerra de Granada, su capitulación arrastró las de Guadix y las de todas las villas de la actual provincia de Almería, incluida la ciudad de Almería, que capitularon sin lanzar un solo tiro. Se entiende por capitulación el convenio por el cual un ejército o una plaza fuerte se rinde al enemigo bajo ciertas condiciones. Los Reyes Católicos hicieron gala de gran magnanimidad en estas capitulaciones, quizás para acelerar la toma de la ciudad de Granada y el final de una dura y pesada guerra.

A finales de 1489 el Zagal abandonó la lucha.

Por acuerdo en esas capitulaciones, el Zagal se quedó con las tahas (división administrativa musulmana) alpujarreñas de Andarax, Órgiva, Lanjarón y Lecrín y recibió veinte mil castellanos de oro cuando entregó Almería. Se retiró a la Alpujarra, a Laujar, capital de la taha (división administrativa musulmana) de Andarax, ubicada en la actual provincia de Almería. La alcazaba de Laujar fue la más importante de toda la región de la Alpujarra. Después el Zagal partió para África.

Sólo quedaba, y en muy difícil situación, la ciudad de Granada, la vega y poco más. Finalmente Boabdil capituló y el 2 de enero de 1492 hizo entrega de la ciudad de Granada. Así terminaban más de 200 años de existencia del Reino nazarí.
Tras las capitulaciones, Boabdil, como antes el Zagal, marchó a la Alpujarra, y se instaló en Laujar. Los Reyes le dieron permiso para trasladar los cadáveres de los emires granadinos a Mondújar.

En Laujar, en agosto de 1493, murió Morayma, esposa de Boabdil y última sultana de Granada. Poco después, en los primeros días de octubre Boabdil -tras vender a los Reyes Católicos los derechos del señorío de Laujar- abandonó la península.

En el cercano puerto de Adra, embarcó rumbo a Berberia (África), con destino a Fez. Vivió casi cuarenta años más.

Recientemente, según publicó el periódico El País, el 14 abril de este 2013, unos arqueólogos dicen haber encontrado en Fez la sepultura de Boabdil, último emir hispano-musulmán:

http://cultura.elpais.com/cultura/2013/04/04/actualidad/1365096820_289142.html

Durante los seis primeros años que siguieron al final de la contienda hubo una verdadera estampía de musulmanes a Berberia y la comunidad musulmana, convertida por fuerza de las circunstancias en mudéjar, perdió sus principales jefes. Otros que permanecieron se habían pasado al servicio de los Reyes católicos y se habían convertido.

Desde la capitulación de Boabdil, el reino de Granada se integró en los reinos cristianos como un reino más hasta la división provincial establecida en el Real Decreto de 30 de noviembre 1833 en virtud de la cual Andalucía -que comprendía los antiguos reinos de Córdoba, Granada, Jaén y Sevilla- fue dividida en las nueve provincias que hoy conocemos.

********************

Y para acabar, si tienen tiempo, lean Los jardines imposibles (diez cuentos de la media luna) de Samir Delgado, ganador del concurso de relatos cortos organizado por el I Milenio del Reino de Granada, delicados y breves relatos e los que no faltan referencias a las tres culturas que habitaron el reino: musulmana, judía y cristiana

http://milenioreinodegranada.es/destacados/los-jardines-imposibles-diez-cuentos-de-la-media-luna/

 

 

LAUJAR (Almería), ÚLTIMO BASTIÓN HISPANO-MUSULMÁN

Laujar en invierno.

M. Dolores Gallardo LópezLa hermosa e histórica villa de Laujar de Andarax, perteneciente a la actual provincia de Almería, se encuentra en la ladera sur de Sierra Nevada, en el corazón de la Alpujarra. Está rodeada de un bello paraje en el que abunda el agua y los árboles. En el año 2012 contaba con 1.735 habitantes.

Laujar comienza a ser conocida en época del séptimo emir omeya, Abd Allah ibn Muhammad al Umawi o simplemente Abdullah ibn Muhammad, durante cuyo mandato estalló la sublevación en al Ándalus en bastantes regiones.

Laujar formó parte de la zona montañosa del sur de al Ándalus que el muladí Omar ibn Hafsún rebeló contra el emir cordobés. El emir consiguió algunas victorias, sin embargo, ya anciano, falleció en Córdoba el 15 de octubre de 912.

Lo sucedió su joven su nieto Abd al Rahmán, de poco más de 21años, hijo de Muhammad (hijo del emir Abd Allah ibn Muhammad, que lo mandó decapitar muy poco después de que naciera Abd al Rahmán) y de una noble vascona). El joven Abd al Rahmán había de convertirse en el gran Abd al Rahmán III, el primer califa cordobés. Una de las primeras acciones del nuevo emir fue acabar con la sublevación.

Para ello en 913 accedió al puerto de Ragua (puerto de montaña a 2.041 metros entre las actuales provincias de Granada y Almería) y pacificó la zona alpujarreña. A partir de ese momento comienza para toda la zona de la Alpujarra una etapa de tranquilidad, prosperidad y crecimiento demográfico, auspiciado por la importancia que fue adquiriendo gradualmente el puerto de Almería.

Laujar destacaba por su magnífica vega junto al río Andarax y también era famosa por su artesanía de la seda, tejido muy apreciado por los musulmanes.

Al desintegrarse el califato de Córdoba surgieron los primeros reinos taifas, entre ellos el de reino zirí de Granada en el año 2013 (su milenario se está celebrando este año) y en 2014 el reino de Almería. Estos reinos desaparecieron en 1091 con la invasión de los almorávides. Tras los almorávides vinieron los almohades. Durante el dominio de ambos pueblos integristas norteafricanos, al Ándalus fue una provincia más de su amplio imperio.

LAUJAR NAZARÍ

Tras la derrota de los almohades en 1212 en las Navas de Tolosa, resurgen una vez más el territorio hispano musulmán los reinos taifas. Entre ellos el reino nazarí de Granada (1238-1492).

Administrativamente el reino nazarí se dividió en tahas. La taha de Andarax tenía como capital Laujar.

Laujar estuvo dotada de una alcazaba, que en época nazarí fue la fortaleza más importante de la Alpujarra.

Este alcazaba quizás existiera ya en el siglo X (según algunos la mandó construir al Mutasim, rey de la taifa de Almería -en la época de los primeros reinos taifas- para defenderse de los ataques del rey de la taifa de Granada). Las citas más precisas son del XII y XIII. En ella vivieron sus últimos tiempos en al Ándalus los dos últimos emires nazaríes: el Zagal se instaló en 1489 y Boabdil en 1492.

La pujanza de Laujar de la época nazarí fue descrita por Ibn al Jatib, prolífico poeta, historiador y filósofo (escribió más de setenta obras y algunos de sus versos decoran las paredes de la Alhambra) que nació en Loja en 1313 y murió asesinado en una prisión de Fez en 1374: desde el año 2005 ambas ciudades están hermanadas en recuerdo del escritor hispano-musulmán.

LA ALPUJARRA, ÚLTIMO BASTIÓN MUSULMÁN

Acabado el reino nazarí de Granada con la entrega de esta ciudad efectuada el 2 de enero de 1492, aún quedó un territorio musulmán en la península: el Señorío alpujarreño, cuya capital fue la villa de Laujar.

El Zagal.

El emir Muley Hazén, en lucha contra su sublevado hijo Boabdil - en Guadix en 1482 se había proclamado emir y adoptado el nombre de Muhammad XII- antes de morir nombró heredero a su hermano el Zagal, que tomó el nombre de Muhammad XIII.

Tío y sobrino llegaron a un acuerdo: el Zagal obtuvo la parte oriental del reino que incluía las ciudades de Baza, Guadix, Málaga y Almería y Boabdil se quedó con el territorio de Granada.

El Zagal perdió Málaga en 1487 tras un duro asedio de las tropas cristianas. Después, Baza ofreció una de las resistencias más larga y enconada de toda la guerra de Granada. El asedio Baza duró desde el 20 de junio hasta el 4 de diciembre, día en el que se rindió. La capitulación de Baza fue firmada el 10 de diciembre de 1489. Se entiende por capitulación el convenio por el cual un ejército o una plaza fuerte se rinde al enemigo bajo ciertas condiciones.

La capitulación de Baza arrastró las de Guadix y las de todas las villas de la actual provincia de Almería, incluida la ciudad de Almería, que capitularon sin lanzar un disparar un solo tiro. Los Reyes Católicos hicieron gala de gran magnanimidad en estas capitulaciones, quizás para acelerar la toma de la ciudad de Granada y el final de una guerra que se les hacía cada vez más dura y pesada.

Por acuerdo en esas capitulaciones, el Zagal se quedó con las tahas (división administrativa musulmana) alpujarreñas de Andaráx, Órgiva, Lanjarón y Lecrín y recibió veinte mil castellanos de oro cuando entregó Almería.

El Zagal se retiró a Laujar y vivió en su alcazaba. El señorío de Laujar fue, pues, corte real.

Boabdil no se resignó a la pérdida de la Alpujarra: en verano1490, apenas instalado el Zagal, suscitó una rebelión en la zona y un golpe contra su tío que a punto estuvo de dar al traste con lo conseguido por los Reyes Católicos con las capitulaciones suscritas con el Zagal.

Boabdil entró en la Alpujarra, la levantó e incluso ocupó la alcazaba de Laujar, de donde el Zagal huyó a Almería. En Almería consiguió tropas y recuperó en julio Laujar y su alcazaba.

Pocos meses después de este levantamiento de la Alpujarra, el Zagal partió para Berberia (África), era el año 1491 y tenía 37 años. Se estableció en Tremecén. Murió tres años más tarde.

A partir de Luís de Mármol, Historia de la rebelión y castigo de los moriscos del Reino de Granada, al que, al parecer, informaron amigos africanos, se ha expandido a falsa noticia de que el rey de Fez, amigo de sobrino Boabdil, lo encarceló y mandó cegar a el Zagal. No es cierto: en 1857 se descubrió en el cementerio de de Abú Hammú de Tremecén una lápida con su largo epitafio sepulcral nos informa de su final tranquilo. Si bien es cierto que cuando se publicó el largo texto de esta lápida, la sepultura fue atribuida a Boabdil, error bastante disculpable dado que el Zagal y su sobrino Boabdil tenían el mismo nombre: Abú Abd Allah Muhammad. El texto de esa lápida puede leerse en José A. Tapia Garrido Almería Mudejar, pgs. 48-49.

Boabdil

Cuando en noviembre de 1491 se ajustaban las capitulaciones de Granada, Boabdil pidió toda la Alpujarra en señorío y el derecho de transmitir este señorío a sus herederos. Tras hacerse efectiva la entrega de Granada el 2 de enero de 1492, marchó allí con su mujer, su madre y su hermana y con los cortesanos que le siguieron. Los Reyes Católicos le dieron licencia para que trasladase los cadáveres de los emires granadinos al cementerio de la fortaleza de Mondújar, en el valle de Lecrín.

Eligió como residencia la alcazaba de Laujar, debió llegar en la primavera del 1492. Entretenía su tiempo cazando con azores y galgos.

Los Reyes Católicos y sus colaboradores más inmediatos comprendieron que la residencia de Boabdil en Laujar era potencialmente peligrosa por estar toda la Alpujarra poblada por musulmanes y bien defendida por su ubicación geográfica.

Por otra parte, algunos cortesanos de Boabdil pensaban que si había una sublevación de la zona, aunque él no moviera un dedo, se lo tendría por instigador.

Así pues muy pronto, en agosto del 1492, ambas partes iniciaron negociaciones para la partida de Boabdil a Berberia.

Boabdil estaba indeciso: había entregado su reino para tener paz y ahora se le negaba. Hernando de Zafra por parte de los Reyes Católicos y sus propios colaboradores le convencieron de que lo mejor era irse. Por las cartas de Hernando de Zafra a los Reyes Católicos se pueden seguir las incidencias de este período.

Finalmente el 15 de abril de 1493 los Reyes Católicos y Hernando de Zafra firman las capitulaciones de la partida de Boabdil y la venta de su Señorío alpujarreño a los Reyes Católicos. Boabdil las firmó después en Laujar.

Los Reyes Católicos cerraron en 23.680 castellanos de oro -equivalían a once millones y medio de maravedís- esta última operación del Reino de Granada: Boabdil percibió 18.000 castellanos de oro por sus posesiones, el resto se repartió entre otras personas.

Entre el 12 y el 28 de agosto (día en que el hecho es comunicado a los Reyes Católicos) muere en Laujar Moraima, esposa de Boabdil y última sultana de Granada. Fue enterrada en el cementerio real de Mondújar, según testigos presenciales.

Boabdil y los suyos embarcaron en los primeros días de octubre de 1493 en el cercano puerto de Adra. Los llevó una escuadra compuesta por cinco barcos, puesta a su disposición por los Reyes Católicos.

Una pregunta ha quedado sin respuesta en la Historia desde el mismo momento de la partida, como en noviembre del mismo año de 1493 insinuaba Pedro Mártir de Anglería, en una carta de su Epistolario:

Tras quedarse con un señorío que sería hereditario ¿Se fue Boabdil lejos de su tierra, a vivir como un desterrado, por su propio voluntad o lo obligaron las circunstancias? Vivió casi cuarenta años más.

En 1494, el año siguiente a la marcha de Boabdil, el rey Fernando ordenó destruir parcialmente la alcazaba de Laujar y construir en su interior un baluarte.

Recientemente unos arqueólogos dicen haber descubierto la tumba del último emir hispano musulmán:

http://cultura.elpais.com/cultura/2013/04/04/actualidad/1365096820_289142.html

Otros personajes vinculados a Laujar

Yahya al Nayar, “el infante de Almería”
. En el año 1500, también se retiró a Laujar hacia el final de su vida y allí murió en 1506 Yahya al Nayar , nieto del rey nazarí Yusuf IV. Fue importante personaje del bando del Zagal, cuñado suyo, buen guerrero y hábil político. Cuando éste era rey de Almería, Yahya al Nayar era considerado por muchos su virrey. Fue señor de la Alpujarra.

Pasado al bando de los Reyes Católicos, fue bautizado secretamente en la cámara del rey Fernando el 25 de diciembre de 1489. Tomó el nombre de D. Pedro de Granada. Sirvió lealmente a los Reyes y gozó siempre de su consideración y estima. Es conocido como “el infante de Almería”.

Abén Humeya. Durante la sublevación de los moriscos alpujarreños de 1568-1571, Laujar y lo que quedaba de su alcazaba fue escenario de hechos importantes.

En los restos de la alcazaba tuvo su cuartel general su jefe, conocido como Abén Humeya (Fernando de Válor y Córdoba y de nombre musulmán Muhammad ibn Umayya.) y en Laujar fue asesinado el 20 de octubre de 1569.

Francisco Villaespesa. En 1877 nació en Laujar, es el más conocido de los poetas almerienses y autor, entre otras, del drama teatral Aben Humeya.

 

 

Los textos, videos y audios de esta web están protegidos por el Copyright. Queda totalmente prohibida su reproducción en cualquier tipo de medio o soporte, sin la expresa autorización de sus titulares.
Editanet © Copyright 2013. Reservados todos los derechos