Edición nº 10 - Enero/Marzo de 2010

Tres vidas de santos

(Relatos)

Tres vidas de santos
Eduardo Mendoza
Seix Barral ,
Barcelona, 2009

por Ana Alejandre

Este volumen de relatos, tres en total, se puede definir por su variedad y no sólo en el estilo narrativo, sino en la extensión y ambientación del trío de historias. Sin embargo, Mendoza les ha otorgado un nexo común: la singularidad de sus personajes a los que no se les puede denominar santos, tal como induce a pensar el título, ni tampoco seres de una extraordinaria espiritualidad; sino más bien, seres extravagantes, visionarios o, incluso, locos que van en pos de una idea a la que sacrifican su propia vida, en una renuncia total por defender un sueño, aquel que les domina el espíritu, aunque no tenga visos de áscesis religiosa, sino la consecución de una idea, por terrenal que sea, pero que se convierte en el eje sobre el que gira las vidas de estos tres protagonistas del trío de relatos.

Cada uno de los relatos es diferente a los otros, pero todos tienen la nota común de la prosa irónica y escéptica de un autor que denota una cierta burla hacia empeño por conseguir una meta soñada, sea cual fuere, porque detrás de esa lucha siempre espera la más absoluta y definitiva derrota vital. Sin embargo, en esa ironía y cierto distanciamiento hacia los personajes que Mendoza adopta, no existe especial ternura hacia sus personajes, porque parece que la propia ironía que le despierta al autor las andanzas y desgracias de los seres que habitan estos relatos que se debaten entre la parodia y la realidad, le hacen tener un distanciamiento que se nota en las tres narraciones, como quien ve un naufragio un día de tormenta en la lejanía y sólo puede contemplarlo, pero sin tener ninguna posibilidad de prestar ayuda, y contempla el desastre pensando que se lo han buscado por salir a navegar en condiciones adversas.

De los tres relatos, La ballena, es la que nos recuerda más al escritor barcelonés y sus crónicas sobre dicha ciudad. Comienza dicho relato en la Barcelona del congreso Eucarístico de 1952, y se van desarrollando los mil avatares absurdos que llevan al Sr. Obispo de Cachimba hasta la ciudad condal y queda allí varado como una ballena que ha quedado encallada en la arena y no puede volver a altamar, por problemas políticos y el propio absurdo que tiñe la vida de su protagonista.

El final de Dubslav, transcurre en un escenario distinto como es África, con un ritmo narrativo distinto al del relato anterior, más intenso, pero sin perder esa ironía que tiñe la prosa de Eduardo Mendoza, en la que la desgracia y sufrimiento de sus personajes parece describirlos con la tinta afilada del sarcasmo por lo que no conmueven al lector, sino puede llegar a irritarle.

El último de los tres relatos es El malentendido, ejercicio irónico sobre la literatura y el propio oficio de escribir que pone en entredicho al propio mundillo literario, sus artificios, sus vanidades y las mentiras que sustenta a muchos de los llamados autores consagrados.

Este libro es recomendable para los entusiastas seguidores de Eduardo Mendoza, porque podrán encontrar en esta obra los tres pilares en los que se sustenta el estilo de este escritor: lucidez, ironía y desencanto.

Donde los espejos de multiplican

(Novela)

Donde los espejos se multiplican
Joaquin Grau
Madrid, 2001,

por Ana Alejandre
Esta obra, Premio Ibn Tufayl del Instituto Hispano Árabe de cultura, es una obra singular en la que confluyen los ecos del realismo mágico, por una parte, y ciertas resonancias de lo mejor de Allan Poe y Lovecraft, en cuanto al horror que se destila en sus páginas, un horror que no sólo es físico, sino psíquico, que es siempre el más terrorífico.

El título hace referencia a la profunda convicción de su autor, gran conocedor de la mente y de los fenómenos psíquicos a cuyo estudio ha dedicado buena parte de su vida, de que sólo encontramos en el exterior, encarnada en los otros, la propia imagen del yo, multiplicada y deformada por el efecto distorsionador de la propia psique. Por ello, los monstruos interiores que toda mente humana contiene en el fondo del inconsciente, formados por los traumas, sufrimientos, temores y vivencias que han marcado con la fría crueldad de los hechos vividos, se escapan al exterior, a través de la locura del protagonista de este libro aterrador en la forma, pero profundamente lúcido y comprensivo de los mecanismos de la mente humana, en el fondo, va desvelando la trama argumental con una técnica narrativa en las que se solapan los tiempos narrativos: el pasado y el presente se alternan en una multiplicidad de imágenes que pone de relieve con mayor intensidad el horror en el que se debate la mente de Andrés,el sepulturero, y a lo que coadyuva el escenario en el que se desenvuelve la acción que es el propio cementerio en el que trabaja, entre el hedor de la muerte y la única compañía siniestra de los enterrados.

Esta novela, no es sólo una narración con el único propósito de crear una obra literaria, sino que tiene el verdadero sentido de un documento que, de forma novelada, explica al lector que pasa página, sintiendo el frío helado de la muerte que atraviesa cada línea, dejándole el ánimo aterido, que el verdadero enemigo al que hay que temer siempre lo tenemos dentro, en esa zona oscura de la que hablaba Jung, y es de ahí, de ese averno desconocido y sin ninguna posibilidad de escapar de él, es del que surgen las imágenes fantasmales que llenan de horror y locura a la mente desquiciada por los propios fantasmas interiores.

Joaquín Grau, Doctor en Periodismo, y una figura muy conocida a través de sus múltiples intervenciones en los medios de comunicación, es un escritor y periodista dedicado a la investigación de la mente y creador de la técnica llamada Anatheóresis, es decir la aplicación de las técnicas regresivas hipnóticas para no sólo vivenciar los hechos vividos desde el momento de la gestación y nacimiento y hasta los siete/catorce años, y comprendiendo y resolviendo los traumas que son los causantes de las enfermedades y del sufrimiento que acompañan al ser humano desde el nacimiento hasta la muerte.

Esta novela pone de relieve a un escritor que tiene una prosa exquisita y rica en matices psicológicos que la convierten en una obra recomendable para los lectores que quieran leer una obra de narrativa de las llamadas del género de terror y, a través de ella, comprender mejor los mecanismos mentales, pero que no sean fácilmente sugestionables por contener escenas de una gran intensidad narrativa en las que el horror, en todas sus posibles manifestaciones, se hace patente.

Excelente libro, sin duda, que no dejará indiferente a ningún lector por avezado que esté en leer libros de temática en la que el terror sea su protagonista.

El hombre vigilado

(Autobiografía)

El hombre vigilado
Vesko Branev
Galaxia Gutemberg/Círculo deLectores
420 págs



Aunque parece que todo ha sido escrito ya sobre las vivencias en primera persona por parte de los diversos autores en los totalitarismos, sin embargo este libro de Vesko Branev, abre nuevas perspectivas sobre dicho fenómeno sufrido por el autor, a lo que hace referencia el propio título del libro que fue redactado basado en los informes que la Seguridad del Estado búlgaro creó sobre él.

El autor, de nacionalidad búlgara, estudiaba, a los 25 años, cine en Berlín y se instaló en la parte occidental de la ciudad, antes de ser construido el Muro de la Vergüenza. Poco después, es detenido por la Stassi y conducido hasta Bulgaria y, desde ese momento, será objeto de continua vigilancia por parte de los llamado „hombres de la sombra“, temiendo en todo momento ser víctima de la cruel y despiadada maquinaria política.

Después de leer dichos informes de los que era protagonista forzoso, Branev va analizando y desenredando, con absoluta lucidez y sinceridad, toda una trama de traiciones en cuyo centro se encontraba por cercanía a tantos informadores y chivatos que podían pasar a ser, en cualquier momento, de amigos o conocidos a simples verdugos ejecutores de una traición inesperada.

Branev no es un activista político, sino sólo un ciudadano que piensa y no quiere renunciar a su propia dignidad personal, por lo que era un resistente a la extorsión continua e implacable a la que estaba sometida permanentemente la sociedad búlgara y en la que cualquier pensador es un disidente, por el simple hecho de utilizar la inteligencia y la razón como armas únicas contra la barbarie de un estado totalitario que no acepta ni permite la disidencia ante sus implacables designios. El título habla del hombre vigilado, espiado y acosado, lo que le llena de perplejidad y temor, pero sin renunciar, por ello, a la propia capacidad crítica y a su irrenunciable dignidad.

Este libro abre nuevas perspectivas sobre un fenómeno ya estudiado y explicado hasta la saciedad, porque a través de los informes analizados y comentados por el propio Branev vamos asistiendo, entre el estupor y el desconcierto del propio autor, a toda una maraña de informes a los que Branev llama „el diario del tiempo humano perdido“, que demuestran el estado paranoico de un sistema totalitario que sólo permite y acepta el ejercicio de una intelectualidad corrupta y que de forma amena nos narra, pero sólo parece querer ajustar cuentas en la última parte del libro por haber sido víctima de lo que el propio autor llama „crimen continuo“.

Interesantísimo y esclarecedor libro de lo que han significado los estados totalitarios en los que es posible sólo la dictadura del terror; pero contado desde la cercanía que da la visión de una víctima de esos paraísos socialistas en los que la libertad y la dignidad del individuo sólo son una entelequia al servicio de los intereses políticos.

Lecciones para el inconformista aturdido en tres h

(Ensayo)

Lecciones para el inconformista aturdido en tres horas
Irene Lozano
Debate



por Ana AlejandreEsta obra cuyo subtítulo es La falta de ideas de la izquierda en la crisis actual, es un libro inteligente que está dedicado a todos aquellos que, sean de izquierdas o de derechas, se encuentran estupefactos y en ese estado de inconformismo ante una izquierda que parece haber perdido en norte y hasta la brújula para poder volver a encontrarlo.

Es un texto en el que se encuentra el humor más inteligente, el guiño al lector, pero no por ello, exento de una ternura cierta que muchas veces parece pedir conmiseración ante los propios males que denuncia; pero todo ello escrito con una impecable factura literaria y una sorprendente valentía por parte de su autora que ganó el Premio Espasa de Ensayo 2005 y ha sido biógrafa de Federica Montseny.

En este magnífico alegato contra el aburguesamiento de la izquierda actual que se ha dejado manipular por los cantos de sirena de los imperios económicos en los que participa directamente, a pesar de autollamarse anticapitalista, perdiendo su propio carácter y convirtiéndose en marioneta que se deja manipular, por el beneficio que obtiene de ello, por los propios poderes fácticos a los que dice combatir, aplaudiendo sus acciones que contradicen su propio discurso.

Esta inteligente ensayista, treintañera para más señas, hace un lúcido análisis de cómo la gente normal, la gente de la calle, es capaz de sacar por sí misma conclusiones sobre la sociedad en la que vive entre la inmoralidad, la falacia y la corrupción siempre ansiosa de conseguir ganancias fáciles, aunque para ello tenga que perder la coherencia, la dignidad y la propia estimación, como es el caso de muchos pseudointelectuales de izquierdas que proclaman lo contrario de lo que hacen en su propia vida personal y profesional.

La autora parece querer reclamar una sociedad en la que sea posible la autonomía moral de cada individuo, sin dejarse catequizar por el poder que quiere imponer un pensamiento único, y recobrar la ética, la dignidad y la coherencia moral en lo público.

Libro recomendable por su profunda significación política y por su valor literario, tan poco frecuente en obras que tienen una idea motriz como es el ensayo político de la talla de esta obra.









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